Me regresaron, Padre

Me regresaron, Padre

Me regresaron, Padre, por eso vuelvo a verte.

Sólo quería abrazarlos y ellos me dieron muerte.

Me rechazaron, Padre, ninguno quería verme.

“nos estorbas-dijeron-eres un ser inerte”

Me llamaron “producto” me succionaron fuerte

Rasgaron mis entrañas, y molieron mi mente.

Yo que traía el encargo de traerles la dicha

Me rechazaron, Padre, por ese vuelvo a verte.

Estaban ocupados con lo trivial de siempre,

Con lo normal, lo bueno, con la ropa y el vientre.

No abracé a mis hermanos, ¡madre, ni pude verte!

De papá sólo supe: contribuyó a mi muerte.

Perdónalos oh Padre, perdieron el sentido,

No saben a quién sirven, ni para qué han venido.

Viven vidas sin rumbo, como algún aturdido.

Si al menos se decidieran a inclinar su oído.

Esclavos entregados al tedio, al egoísmo

No pueden hacer algo si no es para ellos mismos.

Perdónalos oh Padre, yo sé que estás dolido,

¿Cómo no vas a estarlo, si matan a tus hijos?

Es la guerra más cruenta, es el peor homicidio,

Y negocio redondo del médico asesino.

No es que el juez no lo sepa, ni el legista vendido,

Por dinero y por miedo, mata el país sus niños.

Este mal que entontece, tiene raíz suicida,

Valoración errónea, del humano y la vida.

“Polvo del estallido, hijos del gran gorila”

En eso convertimos a la Imagen perdida.

Miseria deliberada, erudición torcida,

Es el destino electo por la razón suicida

Exterminio de especie, planeta infanticida,

¿Cómo esperar con esto que respete otras vidas?

Por eso han matado millones de inocentes

Al anciano, al profeta, y al que venía en el vientre.

Nos dijeron que el mundo ya no era suficiente,

Que la viña era de ellos, que no éramos ni gente.

Se armaron de cuchillos, pinzas, química, uranio,

Inyecciones letales, bombas, mentira, engaño.

Mataron a sus hijos, destruyeron su especie,

¿Qué otra cosa se espera aparte de la muerte?

Nos regresaron, Padre, por eso vengo a verte.

Perdónalos, son ciegos, ciegos que creen tenerte.

Tal vez si tú les mandas alguien que los oriente

Pero no, ¡si aún a Cristo le han causado la muerte!

Pude ser que mi madre si entiende se arrepienta,

Tal vez mi padre mismo oyendo, se convierte,

Hagamos otro intento, quizás alguno entienda

Tal vez si escucha, piense, el pueblo, el presidente.